Los derechos de los mayores

Los derechos de los mayores

A usted señor presidente yo le invito a que nos diga simplemente, razón y motivo.
Acaso se olvidó usted señor de los mayores, esos que sin descanso tanta esfuerzo nos entregaron, ellos nunca tuvieron derechos ni honores. Esos que vivieron sin lujos, sin derroches, ni comodidades, ellos son señor, nuestro mayores, lo que hoy caminan perdidos sin un futuro, por este presente injusto que es tan amargo y crudo.

Usted señor presidente, se paró a pensar por un segundo, que esos hicieron posible el lugar que hoy toma como tan suyo, no les quedaron pagas, solo miserias, limosnas que les ofrecen como encomienda, tantos salarios ofrecieron tantas jornadas, y hoy solo les deja una vida sin un mañana.

Mas permítale que le recuerde por un instante, que eso es un maltrato sin más palabras, ni escaparate. Las leyes que ustedes defienden como correctas, por más que trato de entender, no veo la cuenta, hacer que pasen escases sin más salida, es obligarles a que no puedan vivir la vida. Ellos que dieron tanto sin pedir nada, y ahora caminan solos, sin una mano que les ampare, nadie quiere por ellos el implicarse, y callan y en su silencio van hacia adelante.

Tantas largas jornadas ofrecieron sin justo salario, ni conocieron vacaciones ni paga alguna, trabajaban cada día sin saber que era fiesta o diario.
Tener en casa comida ya era toda una fortuna. Vivian solo por los suyos sin pedir nada
Y ahora les toco vivir una vejez injusta, una vejez ingrata.

Maltrato a los mayores se les regala, con mil palabras bonita muy disfrazadas
se les impone, se les obliga a vivir sin nada, hoy siento por ellos una inmensa pena, siento quebrada el alma, cuando puedo ver lo que sufren y aun se callan.
Y pensando en los suyos no dicen nada. Por ellos aun abatidos viven sin nada.

Recuerde usted señor que ahora sobran todas las vanas palabras.
Empiecen con soluciones, hechos que escasean, no más palabras falsas.
No, es NO, para todos y digo vasta, pensemos en los mayores
En soluciones ciertas , no más palabras. Pensemos en los mayores les hacemos falta.

Francis Falcón..